La 'terrorífica' noche del equipo ‘Shiva’ en una chabola donde los animales campan a sus anchas
El equipo 'Shiva' tuvo que pernoctar en una humilde casa con animales
Los participantes prefirieron dormir en el hall que en la habitación
Con humedad, mucha suciedad y sin inodoro: nos colamos en el 'hotel del horror' de Katmandú
Inma Campano, Christofer Mateo, Yoli Claramonte, Cristo Contreras y Mahi Masegosa perdieron la prueba que les daba el privilegio de poder pernoctar en un hotel de lujo. Al equipo 'Shiva' le pilló, además, en plena travesía fuera de Nepal así que no imaginaron dónde tendrían que pasar la noche.
Los cinco participantes de 'En busca del Nirvana' habían experimentado lo que es un hotel humilde de Katmandú. Pensaron que nunca llegarían a dormir peor que esa noche pero no imaginaban que nada más lejos de la realidad, porque en su viaje hasta la selva terminarían pernoctando en una especie de chabola donde los animales de la zona entraban y salían a sus anchas.
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El equipo 'Shiva' encuentra aves sueltas y heces de cabra en su habitación
Los participantes entraron con miedo a la humilde casa, temiendo lo peor. Se encontraron de primeras con un cabritillo que les dio mucha alegría... hasta que se dieron cuenta que en las camas había heces y orines de cabra.
No fue la única sorpresa que encontraron Christofer, Cristo, Inma, Mahi y Yoli. Por debajo de las camas no había una sino varias aves que Inma se atrevió a coger. Cristo Contreras, sobrepasado por las circunstancias, abandobaba el lugar diciendo que prefería dormir en la calle. Más aún cuando después encontró con Inma lo que sería su baño para esa noche.
Mientras tanto, el equipo 'Ganesha' disfrutó de la comodidas de un hotel limpio e Iratxe, Charlotte y Andrea se sintieron tan cómodas que poco les faltó para una 'Pijama Party'.
No obstante, al día siguiente Andrea Gasca echó mucho de menos su plancha del pelo de color rosa y edición limitada, ya que se desprendió de ella quemándola en una hoguera para ganar así la prueba extra del concurso. Demostrar su desapego implicaba tener que renunciar a su pelo siempre perfecto. Así que Charlotte le ayudó a 'paliar los estragos' con una plancha de ropa.
