El pasado viernes, un atentado brutal en un teatro de Moscú, provocó la muerte de 143 personas y más de 180 heridos. A pesar de que el Estado Islámico ha admitido su autoría, Putin parece que prefiere pensar otra cosa y apunta a Ucrania y promete castigo y venganza contra los ucranianos.
El presidente de Rusia, en unas declaraciones tras los atentados y después de que el ISIS asumiera su autoría, comparecía ante los medios y declaraba: "Los cuatro autores materiales del acto terrorista intentaron esconderse y moverse a Ucrania. Allí, según los datos, tenían preparado el cruce de la frontera desde el lado ucraniano".
Chema Gil, director de Seguridad, tras estas palabras de Putin culpando a Ucrania, aseguraba: "Rusia necesita construir una narrativa que le pueda reforzar el frente bélico que tiene desplegado en Ucrania". Con este relato que ha construido Rusia, "le permite justificar las salvajadas que hace en Ucrania".
Por otro lado, Chema recuerda, que en Moscú es más fácil pensar así y vender esa idea que echar la culpa al Estado Islámico y enfrentarse a ellos.
Además, añadía, que son numerosos los motivos que tiene el Estado Islámico para vengarse de Rusia son varios y detallaba: "En primer lugar, por el frente que ha mantenido en Siria y donde se mantiene una guerra y que los rusos están machacando al Estado Islámico y también por todo lo que está haciendo Rusia en el área del Sáhara donde está luchando contra los grupos de Al Qaeda".
Para terminar, el director de Seguridad de Universae, aclaraba, que en Moscú no solo se ha producido este atentado y subrayaba: "El 7 de marzo hubo otro ataque brutal por parte de otro grupo de Estado Islámico y anteriormente, el 3 de marzo, las fuerzas de seguridad rusas se enfrentaron a otro grupo para abortar un ataque terrorista".
"No creamos que este ataque ha sido una excepción, lo extraordinario ha sido la cantidad de muertos, el despliegue y la forma en la que el grupo terrorista ha reivindicado su autoría, con los vídeos grabados por los propios terroristas", quería dejar claro Chema Gil.