El testimonio de unas vecinas rodeadas de okupas y peleas en Gran Canaria: "Destrozan todo, venden drogas y roban coches"

  • El hombre que ha tenido que ser reducido por la Guardia Civil tras amenazar a la hija de su expareja es okupa en Arucas, Gran Canaria

  • ‘En boca de todos’ se ha desplazado a la casa donde vive este hombre con otros okupas y el equipo del programa recibía amenazas

Durante el día de ayer, se hacían públicas unas imágenes en las que podíamos ver a un hombre amenazando a la hija de su expareja con un destornillador. La Guardia Civil tuvo que dispararle en una pierna para lograr reducirle y detenerle.

Este hombre, tiene atemorizado a todo el barrio de Arucas, en Gran Canaria. Es un maltratador muy peligroso, que vive en una casa okupa y es extremadamente violento. Ya en el programa, en el mes de agosto de este año, se hacían eco de unas imágenes en las que se podía ver a este hombre maltratando a su pareja.

‘En boca de todos’ se ha desplazado a la casa donde vive este hombre con otros okupas y el equipo del programa recibía amenazas y no dejaban grabar cerca de la casa okupada.

Una vecina desesperada: "Alquilan habitaciones a gente en busca y captura"

Los vecinos cercanos a esta vivienda, hartos de las peleas, los gritos y la suciedad de estos okupas, hablaban delante de las cámaras del programa. Una de las vecinas, afirmaba: “Esto era un barrio muy tranquilo, llevo 32 años aquí y jamás ha pasado esto”. Esta mujer expresa, que todos los problemas han comenzado cuando hace año y medio esta familia okupaba esta casa. Además asegura, que han destrozado toda la casa, amenazan a los vecinos continuamente, arañan los coches y alquilan habitaciones para la gente que está en busca y captura.

Otra de las vecinas de esta localidad, también indicaba que algunos de ellos venden drogas, roban coches que utilizan para robar materiales. “Han destrozado todo, la comunidad, el pueblo, estamos desesperados”.

Nacho Abad preguntaba a estas vecinas, si la Guardia Civil actúa contra estos okupas y ellas respondían que ellos solo iban cuando algún vecino les llamaba, pero no pueden hacer más de lo que hacen y no se llega a ninguna solución.