Todo comienza por una discusión entre el camarero de un bar en Boltaño, Huesca y un cliente que se negaba a pagar una consumición. Úrbez, que se encontraba en la mesa de al lado, se percata de la discusión y se dirige al cliente para indicarle que debe abonar la consumición porque "el pueblo no se sostiene solo". Acto seguido, el hombre se dirige a su coche, saca una navaja y se lo clava en el pecho a Úrbez.
El joven con tan solo 29 años falleció, aunque los servicios de emergencia intentaron reanimarle durante 45 minutos, nada pudieron hacer por salvar su vida. Tras este hecho, el pueblo de Boltaño está consternado. El dolor de sus familiares y amigos se hace presente y declaraban frente a las cámaras: "Todavía no me he recuperado, si pienso en él, lo sigo viendo vivo". La familia del fallecido es muy conocida en el pueblo ya que forman parte de la orquesta municipal de este municipio.
Arán, uno de sus amigos, no da crédito a lo ocurrido. Afirma que su amigo era una persona muy tranquila y amigable. Del presunto asesino, asegura que no sabe nada de él, solo que llevaba tan solo 6 meses viviendo en el pueblo y que casi no se relacionaba con nadie.
Según nos cuenta este amigo, en el momento de los hechos le dicen que no había mucha gente en el bar durante el momento del apuñalamiento. "A todos les pilló por sorpresa, esto es un pueblo tranquilo en el que nunca pasa nada", aseguraba Arán. El agresor tiene 38 años y fue detenido por los agentes de la Guardia Civil.