Rocío Caíz tenía 17 años y un bebé de cuatro meses cuando fue estrangulada y su cadáver descuartizado y metido en distintas bolsas, que su asesino ocultó por distintos puntos de la localidad de Estepa.
Este terrible suceso ocurrió en el piso en el que había vivido hasta semanas antes con su novio. Días más tarde, cuando terminó confesando, fue arrestado. Este atroz crimen será juzgado en dos semanas meses en la Audiencia de Sevilla. Fiscalía sólo pide 14 años de cárcel por la muerte de Rocío, al calificar los hechos como un homicidio.
La familia está totalmente indignada y ha rogado entre lágrimas que se le condene a prisión provisional permanente. 'En boca de todos', entre lágrimas, sus padres y su abuela han mostrado su indignación.
Rocío y Adrián mantuvieron una relación sentimental, fruto de la que tuvieron un hijo en común. La relación se terminó y la menor volvió a casa de sus padres en Martín de la Jara, según expone la Fiscalía en su escrito de calificación y el juez instructor en su auto de apertura de juicio oral, a los que ha tenido acceso este periódico.
La tarde del 2 de junio Rocío y Adrián habían quedado en su piso de Estepa. Ella llegó en un taxi desde Martín de la Jara, que pagó su exnovio, según las acusaciones. El taxista fue el último que la vio con vida. Habían quedado para acordar la pensión de alimentos del bebé.