Begoña alquiló su casa y los inquilinos han resultado ser una banda armada de okupas que fueron detenidos por simular ser policías, en El Rompido, Huelva. La dueña lleva años sin poder entrar en la vivienda y hasta los vecinos se han enfrentado a ellos.
Los okupas dejaron de pagar hace meses y no están dispuestos a abandonar la vivienda. Hablamos en directo con Begoña, la víctima, que no quiere dar la cara porque es consciente de lo peligrosos que son estos individuos.
El hombre fue detenido por realizar varios atracos haciéndose pasar por policía. Cuando esto sucedió, se descubrió que tenía armas robadas. Una vez puesto en libertad, se metió en casa de Begoña. Por eso la víctima y su familia tienen miedo.
“La justicia, si es lenta, no es justicia. Y lo que me queda todavía. No puedo dar de baja los suministros porque son coacciones y no puedo mantener todos estos gastos. De agua me llegan recibos de 196, no me pagan alquiler, y, sobre todo, lo peor, es la angustia que nos genera a mi familia y a mí. Esto es un sinvivir, las leyes les protegen a ellos y a nosotros no nos ampara”, se lamenta.
Escuchamos el testimonio de Begoña completo de esta víctima, que nos aclara qué mentiras cuentan los okupas sobre ese contrato, cuántas personas hay viviendo en el interior de esa casa ubicada a pie de playa y qué problemas se está encontrando con estas personas.