El pasado lunes sobre las 8:20 horas de la mañana, la Guardia Civil recibía una llamada muy preocupante: una persona afirmaba haber colocado una bomba en el colegio González Gallarza de la Localidad de Rincón de Soto, la llamada la hizo utilizando un distorsionador de voz.
Una vez allí y tras realizar las investigaciones pertinentes, la Guardia Civil descubrió que se trataba de una falsa alarma, al parecer la autora de la llamada fue una joven de 14 años, con la participación de otras dos menores de 12 y 13 años.
‘En boca de todos’ ha hablado con Mercedes Martín, portavoz de la Guardia Civil en Madrid, para que explique en el programa si es frecuente que ocurran este tipo de actos por parte de los jóvenes.
‘’Por desgracia hay determinadas épocas, sobre todo cuando coinciden con épocas de exámenes que sí, es reiterativo porque lo que sí estamos obligados es que cuando recibimos una llamada de ese tipo es a desplazar a las unidades de emergencia hasta el lugar y comprobar que es una falsa alarma’’.
Nacho Abad ha querido conocer las consecuencias que estas llamadas pueden tener para los menores que la realicen: ‘’En este caso a esta menor se la investiga porque tiene 14 años, sus compañeras son inimputables porque tienen menos de esos 14 años, pero puede causar la detención y si es reiterativo todo se va incrementando’’.
La portavoz de la Guardia Civil explica que en La Rioja existe una ley que agrava y que la multa a la que pueden verse cometidos los progenitores puede superar los 100.000. Además, afirma que siempre que hay una llamada así, siempre tienen que comprobarla sí o sí y que acuden al lugar para comprobar que es una falsa alarma porque ‘’hay que darle veracidad’’.