Un policía nacional ha fallecido durante la madrugada de este miércoles en un tiroteo con la Guardia Civil, los hechos se produjeron a la entrada de la localidad de Villagonzalo Pedernales, en Burgos. El hombre de 46 años estaba de baja psicológica y se le había retirado su arma.
Según indica Nacho Abad, todo comenzó unas horas antes en A Coruña, cuando el agente entra en comisaria y le roba el arma a otro compañero. Tras llevarse a cabo su búsqueda, consiguen interceptarlo en una gasolinera de Burgos.
‘En boca de todos’ se ha desplazado hasta el lugar de los hechos y Alberto Catalán nos explica todo lo ocurrido, al parecer, cuando se pudo determinar su posición, cerca de Burgos, tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional de Burgos establecieron un dispositivo operativo para interceptarlo antes de su llegada a la ciudad.
Cuando los agentes le dieron el alto, hizo caso omiso y al verse acorralado, el policía comenzó a disparar contra los agentes, momento en el que el resto de los agentes intentaron repeler las balas y lo abatieron.
El policía fallecido, natural de Ferrol, y destinado en la comisaria de Lonzas, A Coruña, se encontraba inmerso en una investigación de Asuntos Internos por un caso de narcotráfico por el que le habían detenido recientemente.
El agente de 46 años estaba de baja psicológica y desde este martes, 18 de abril, había pasado a segunda actividad "por insuficiencia de aptitudes psicofísicas", una situación, no obstante, que estaba pendiente de notificar.
En la mañana del mismo martes se personó en la comisaría gallega en la que estaba destinado para realizar un trámite administrativo en relación con su situación laboral. Después, aprovechó para ir a los vestuarios y sustrajo el arma de otro policía forzando la cerradura del armario donde estaba guardada el arma.