El aumento de la factura de la luz sigue generando problemas y se nota también en los negocios. En el programa ‘En boca de todos’ conocemos la situación en la que se encuentra José Luis Azañón, propietario de una cadena de peluquerías que se ha visto obligado a despedir a la mitad de su plantilla por la subida de la electricidad.
Con el ejemplo de la factura de la luz de uno de sus negocios, José Luis Azañón explica que en el mes de julio de 2019 “estuvimos pagando 825 euros”. Después, en el año 2020 “pasamos a pagar 948 euros y en el 2021, 1.150 euros”. Finalmente, el duelo de la peluquería ha pagado este año 2.120 euros “estamos hablando de multiplicar 2,3 veces el importe que veníamos pagando”.
La única solución ha sido prescindir de algunos de sus empleados, “por desgracia la peluquería ha sido uno de los sectores más afectados por la pandemia”, señala el propietario de la peluquería. Además, habla por parte de todo el sector que ha perdido hasta el 30% de sus establecimientos, asegura.
La pandemia ha ocasionado que no se puedan recuperar y “esto unido al incremento de costes, no solo de la luz, por tres veces ha subido el salario mínimo interprofesional en los últimos dos años”. El problema es que los incrementos “no los hemos podido trasladar al cliente, porque el cliente final no admite las subidas de precios”.