El director y sumiller de Diverxo, Javier Arroyo, ha explicado que el servicio de este restaurante es muy complejo y que, aunque parezca que están descoordinados, trabajan sin parar con un ritmo muy frenético que no todo el mundo aguanta. “Este es el espíritu de Diverxo, vamos haciéndolo todo sobre la marcha y a todo gas”, aseguraba Dabiz Muñoz.