A 48 horas de la apertura del tercer Diverxo, Dabiz ha contado que para la decoración del restaurante pidió que acoplaran la personalidad de Diverxo, es decir, él pretendía que cuando la gente entrara en el restaurante pudieran respirar la locura que él tiene en la cabeza. Estaba muy contento con las nuevas instalaciones y ha exclamado: “Si existiese la cuarta estrella tendrían que dárnosla, la pena es que se acaba en tres”.