Después de ir a varios sitios para ver como se hacían, Raquel Salazar lo tiene claro: hacer una 'baby shower' esta chupado y decide hacer una prueba en casa con Noemí. Empieza con la comida. "Un poquito de color, un poquito de imaginación" y facilito. Después se ponen con la decoración pero hay un problema. No tienen las letras para deletrear 'baby shower'. El resultado del ensayo es mejorable pero Raquel no se viene abajo: "Veo venir un súper-mega-exitoso baby shower".