Varios empleados que trabajaron o incluso que aún trabajan en Epic Games, denuncian las largas y normalizadas jornadas de entre 70 y 100 horas semanales, a lo que se suma la falta de descansos según publica Polygon. Además, el reportaje refleja que se trata de una experiencia común en varios departamentos de la empresa y uno de sus testimonios afirma que hay áreas enteras sumidas en la depresión.