Cada vez más gente practica yoga. Los ejercicios que proporcionan esta práctica nos sirven para encontrarnos mejor por dentro y por fuera, resultando beneficioso tanto para músculos o huesos, como para alcanzar un estado de plenitud a nivel interno, combatiendo al estrés o la ansiedad, encontrando una paz interior difícil de ver en cualquier otro medio de activación.

Tanto si habéis hecho yoga en alguna ocasión como si estáis empezando en el mundillo y sus acepciones, habréis escuchado la palabra pranayama.

Pranayama es una técnica de respiración alterna recurrente en el mundo del yoga, basada en ejercicios destinados a ejercer control y concentración sobre el praná; la energía que se contiene en la respiración dentro del organismo.

Los ejercicios de respiración pranayama son muy útiles para autorregularnos, así como para trabajar nuestra energía vital y cultivar la salud mental, emocional y física.

Una práctica habitual de ejercicios paranayama nos proporciona enormes posibilidades a la hora de manejar situaciones como el estrés, las emociones o los estados de ánimo. Además de reducir depresión o ansiedad, esta práctica también regula nuestra presión sanguínea, incrementa nuestros niveles de energía y relaja los músculos.

Realizando este tipo de acciones, no necesitaremos más que trabajar con nosotros mismos para regular situaciones habituales cotidianas que puedan resentir nuestro interior. La ansiedad o el estrés son situaciones muy habituales entre gran parte de la población y, con la realización de ejercicios pranayama, esto puede paliarse de forma autónoma, regulando así el prana; la energía de fuerza vital de nuestro interior.

El Pranayama es la cuarte de las ocho ramas del Raja Yoga, o lo que se conoce comúnmente como Yoga Mental: el yoga de la interiorización, con el que explorar lo más profundo de nuestra mente en todas sus dimensiones.

El objetivo principal de los ejercicios paranayama y del Yoga Mental, puede decirse, que no es otro que el de tomar el dominio de nuestra mente, controlando en la medida de lo posible los estados de ánimo o las emociones. La energía de nuestro cuerpo. Puede ser, sin duda, una de las prácticas más poderosas de yoga para nuestra salud mental y emocional.

Así, mientras la parte Hatha del yoga se centra en la parte física de nuestro cuerpo, el Raja Yoga, profundiza en la parte mental.

Pranayama forma la parte del yoga especializada en controlar nuestra respiración vital para alcanzar estados de paz y control de la mente como los mencionados con anterioridad. Para ello, es recomendable previamente dominar otras técnicas más sencillas, como los ejercicios Asana.

Dominando el pranayama haremos lo propio con cuerpo y mente, siendo una de las técnicas destinadas y recomendadas a aportarnos paz mental ante situaciones complicadas.