El mundo no deja de sorprender y en el deporte no iba a ser menos. Los medios de comunicación en Noruega no hablan de otra cosa en los últimos días de la que han liado algunos jugadores del SK Brann, equipo de la Primera división de Noruega han sido noticia por haber organizado una orgía en el estadio del club el pasado 14 de agosto.

Las cámaras de seguridad del propio estadio fueron las que desvelaron este hecho por el que ha sido despedido un futbolista y otros 10 han recibido una sanción. “Hubo un incumplimiento respecto de las líneas de trabajo, de las normas generales, de las restricciones en torno al coronavirus y también en cuanto a la conducta esperada de parte de los empleados”, decía el comunicado del club.

Kristoffer Barmen. Este es el nombre del único futbolista que ha sido despedido ya que se le señala como el principal organizador de la orgía. En dicho evento había 11 jugadores del club y siete mujeres que fueron invitadas. El letrado del jugador expulsado también se ha pronunciado al respecto y ha comentado que el su cliente ha sido tratado de “manera injusta”.

Este acto se celebró el pasado 14 de agosto y las imágenes del estadio desveló todos los pasos que habían dado los integrantes de la misma. Estuvieron los jugadores con las chicas en las instalaciones del campo, las abandonaron para ir al restaurante y luego volvieron para seguir con la fiesta privada. Además, en la grabación aparecen varios jugadores corriendo en ropa interior por el césped, informó el diario Bergensavisen.

Esto está encuadrado dentro de la pandemia y de unas medidas sanitarias que no fueron respetadas en ningún momento por los asistentes. El club ha mostrado su total rechazo ante esto, pero sin aplicar graves sanciones. “Violaron las reglas internas, han pedido disculpas y comprendido la gravedad de lo ocurrido, pero tenemos que seguir adelante. Ninguno será apartado. Ha sido un castigo suficiente lo que han pasado los últimos días”.

Este acto podría ser mucho más grave de lo que un principio pudiera parecer un simple escándalo dentro del mundo del fútbol. La Policía noruega ha decidido investigar estos hechos ante un presunto delito sexual. Las autoridades explicaron al diario Bergensavisen que una de las personas que estuvieron allí se pudo sentir agraviada.

“No hemos recibido denuncia alguna, pero basándonos en las informaciones recibidas y en nuestras propias pesquisas, creemos que hay base para investigar si ha ocurrido algo punible”, afirmó en un comunicado la Policía.