En los deportes norteamericanos es habitual encontrar sistemas de elección de jugadores como son los Draft. Aquí conocemos especialmente el draft de la NBA al ser un deporte más popular en España, pero también se lleva a cabo como en otros deportes, como la NFL de fútbol americano.
El funcionamiento del draft de la NFL es bastante similar a lo que conocemos de la NBA, en el que los equipos tienen la capacidad de escoger entre jugadores prometedores para formar parte de la plantilla y así hacer una competición más equilibrada.
El draft de la NFL se conoce como la NFL Annual Player Selection Meeting. Es un sorteo que se realiza cada temporada, y abre a los equipos participantes la posibilidad de escoger entre los jugadores universitarios graduados y también a aquellos que sean elegibles por primera vez.
Esta mecánica deportiva lleva realizándose en la NFL desde el año 1936, siendo ya una tradición y un momento repleto de expectación. Los fans de cada equipo siguen el acontecimiento para comprobar y tener esperanzas acerca del futuro próximo de su equipo si es capaz de fichar a una superestrella.
Durante todos estos años, la mecánica del draft ha tenido diversas variantes, pero siempre ha estado bajo la supervisión del comisionado de la NFL. Por ejemplo, hace varios años, los equipos hacían selección un poco a modo de ‘lotería’ puesto que no tenían los medios para ojear a todos los jugadores talentosos y prometedores.
Los equipos más poderosos sí que comenzaron a hacer scouting, lo que obligó al resto de equipos a hacer un esfuerzo para hacer lo mismo y poder conocer a los jugadores que serían seleccionables en cada acto.
Otro de los aspectos cambiantes del Draft de la NFL es la ciudad. Cada año se celebra en una ciudad diferente de los Estados Unidos. Su importancia ha ido a más cada temporada y se trata de uno de los eventos televisivos más importantes del deporte norteamericano.
El objetivo principal del draft es que la competición disputada se equilibre. Por eso, los equipos que peor clasificación han tenido durante la campaña anterior, tienen la posibilidad de escoger en primer lugar.
Así, pueden optar a una estrella emergente que ayude a que el equipo crezca y puedan tener opciones mucho más ambiciosas: un evento pensado para que el peor equipo pueda fichar al jugador más prometedor.
Al igual que ocurre en la NBA, una vez se asignan las posiciones, los directivos del equipo pueden elegir entre aprovechar la oportunidad contratando a un jugador de futuro, o negociar su posición con otro equipo, utilizando el pick como moneda de cambio a jugadores o incluso otras posiciones.
Una vez establecido el orden, los equipos pueden pasar a realizar sus selecciones en función de las necesidades que tengan en la plantilla. Por ejemplo, los Quarterbacks son los más cotizados: es la demarcación que más veces ha ocupado el primer puesto, en un total de 32 ocasiones.
También hay que seleccionar que el Draft no siempre es una regla de tres que asegure nada a los equipos. El caso más sangrante lo encontramos en el Draft de 2000, donde los New England Patriots seleccionaron a Tom Brady en el puesto 199. El resto, es historia: uno de los mejores jugadores de la historia de la NFL: seis anillos de campeón, 4 MVP de la NFL y 3 MVP de la SuperBowl.