Cristiano Ronaldo ha ganado su segunda liga italiana desde que fichó por la Juventus procedente del Real Madrid. Como un título así no se gana todos los días, el delantero portugués ha querido regalarse un coche valorado en ocho millones de euros. Algo que no ha sentado demasiado bien a la afición italiana viendo la gran crisis económica que atraviesa el país, derivada del paso de la pandemia del coronavirus.
El delantero portugués es un gran amante de los coches, su colección está al alcance de muy pocos e incluye modelos exclusivos y personalizados. Tras proclamarse campeón del Scudetto, Cristiano Ronaldo ha querido regalarse un Bugatti Centodieci, cuyo valor de mercado se sitúa en los ocho millones de euros. Una cantidad a la que habría que añadir los elementos personalizados con su nombre de marca, CR7, que el delantero de la Juventus siempre incluye en sus coches para hacerlos aún más exclusivos.
Este modelo de la marca italiana es tan exclusivo que solo se van a fabricar diez unidades en todo el mundo, además, es actualmente el coche más caro que posee la compañía de automóviles. Su diseño moderno, sus 1,600 caballos o su velocidad máxima de 380 km/h, hace que este modelo de Bugatti sea el más codiciado entre los amantes de los coches de lujo.
Cristiano Ronaldo, que ya ha posado junto a él en redes sociales, ha vuelto a despertar la animadversión de cierta parte de su afición. Y es que algunos seguidores no ven bien que el ariete haga ostentación de un capricho así cuando Italia vive una muy mala situación económica debido al coronavirus, ya que el virus se ha cebado especialmente con el país italiano.
Cristiano Ronaldo ha aprovechado estos primeros días de vacaciones para recorrer la costa italiana con un lujoso yate de 5.5 millones de euros. Una embarcación que el delantero portugués se ha encargado de enseñar en sus redes sociales debido al acuerdo publicitario que tiene con un astillero italiano, que le ha rebajado el precio del barco a cambio de publicidad.
El delantero italiano de la Lazio Ciro Immobile terminó este sábado su temporada en la Serie A con 36 goles, lo cual le hace ganador de la Bota de Oro al máximo goleador de Europa. De hecho, Immobile ya empezó la última jornada de la temporada sabiendo que Cristiano no haría ningún milagro ya que el luso no entró en la convocatoria del partido de la Juventus. La Bota de Oro de Immobile supone la tercera italiana, tras las de Luca Toni (2006) y Francesco Totti (2007).