Los deportistas están asustados. Y es normal. Cada vez es más habitual leer noticias de algunos de los mejores deportistas del mundo siendo saqueados en sus casas durante las competiciones. Futbolistas, ciclistas, boxeadores, a los ladrones les da igual.

Un problema que está siendo estudiado por la Policía de todos los países y que tiene como objetivo a deportistas de élite con mucho dinero. Incluso algunos robos suelen ocurrir poco después de triunfos deportivos, conocedores los ladrones de que pueden tener premios de gran valor.

Y aunque esto esté en manos de la policía, los deportistas han encontrado una protección mejor. Y es que la nueva moda es la compra de perros guardianes capaces de proteger las viviendas de los deportistas mientras estos se encuentran de competición.

El último en sumarse a esta moda ha sido el ciclista y campeón del Tour de Francia, Mark Cavendish, que fue asaltado a punta de cuchillo en noviembre de 2021. Cavendish ha tomado manos en el asunto y se ha comprado dos perros de más de 20.000 dólares.

Los han recogido en la empresa Elite Protection Dogs, que también trabaja con otros deportistas. Sin ir más lejos, Emiliano Martínez 'El Dibu' y Hugo Lloris, porteros de Argentina y Francia, también se pusieron en contacto con esta empresa para la compra de perros protectores.

Tyson Fury también compró un Rottweiler de £ 20,000 para ayudar a proteger su hogar. El futbolista Kyle Walker fue otro de los que compró un dóberman de 46.000 euros para ‘asegurar’ su casa de los ladrones. Incluso Ahsley Cole, llegó a comprar un pasto alemán entrenado después de un traumático robo en su vivienda con su familia.

Un futbolista que se une a Mikel Arteta, Jack Graelish, Dele Alli, Rio Ferdinand o Marcus Rashford entre otros como aquellos que han adquirido un perro. Una moda criticada por muchos pero que sirve para asegurar la tranquilidad de sus familias.