Alice Campello y Morata vivieron momentos difíciles en el nacimiento de su hija: "Estaba muy mal y tenía la cara destrozada"
La modelo italiana sufrió complicaciones tras el parto
Morata fue el único que fue consciente de todo lo ocurrido
Alice Campello, en la UCI tras dar a luz a su cuarto hijo con Álvaro Morata: "Ha empezado a tener complicaciones"
El 9 de enero de 2023 el futbolista del Atlético de Madrid, Álvaro Morata, y la modelo, Alice Campello, dieron la bienvenida a su primera niña, después de haber tenido 3 hijos anteriormente. Después del parto, Alice comenzó a tener complicaciones y tuvo que estar ingresada en la UCI durante varias horas. En una íntima entrevista para la revista Hola, la pareja se sincera sobre el episodio más duro de su vida.
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La modelo italiana describe el parto como “el más bonito que he tenido”, pero lo peor vino después, “cuando ya estaba en la habitación, tenía a la niña conmigo y estábamos con la familia, de repente empecé a sangrar muchísimo. Recuerdo que, al girarme, vi la cara de Álvaro superblanca. A partir de ahí no recuerdo nada más porque me llevaron a quirófano y estuve allí desde las 9 y media de la mañana hasta las 9 y media de la noche, dormida”, confiesa Alice.
La italiana relata lo que le ha sucedido: “No había dejado de sangrar en ningún momento, tuvieron que hacerme muchas transfusiones y al final me pusieron un globo dentro del útero. Fue solo un gran susto que ocurrió porque el útero no se había contraído, lo cual me produjo esa hemorragia tan grande”.
La confesión de Morata
Alice Campello no se enteró de nada porque rápidamente fue llevada a quirófano y estuvo durmiendo durante horas, de manera que el que más angustia vivió fue Álvaro Morata. “Entendí la gravedad de la situación porque vi a Álvaro como nunca. Estaba muy mal y tenía la cara destrozada. Luego se fue porque no podía estar en la UCI todo el tiempo, pero me escribía mensajes super bonitos. Ahí comprendí su angustia”, relata la modelo.
El futbolista del Atlético asegura que vivió una montaña rusa de emociones durante esas horas en las que incluso se temió lo peor: “Mi vida no tendría ningún tipo de sentido si le pasaba algo más grave. Tenía una preocupación alucinante”, confiesa el delantero. Que asegura que no se calmó hasta que, horas después, pudo ver a su esposa acompañada de todos sus hijos: “Después vinieron a verla conmigo los niños y creo que ese momento ha sido el mejor de mi vida”.