La española Nuria Vilarrubla ha terminado en la octava plaza de la final de la categoría C1 de piragüismo eslalon de Tokio 2020, en los que la australiana Jessica Fox confirmó los pronósticos y se convirtió en la primera campeona olímpica de la modalidad, que se estrenaba en unos Juegos.
La catalana, novena del ránking mundial, accedió a la final con el octavo crono de las semifinales (119.99), que no pudo rebajar en la bajada definitiva, en la que, tras tocar las puertas 12 y 21, penalizó con cuatro segundos para marcar 127.33.
La palista de La Seu d'Urgell, de 29 años, sabía que necesitaba mejorar notablemente. Hizo un buen primer tramo de descenso, rebajando los cronos de las dos primeras finalistas, pero a partir de ahí se atascó en el exigente circuito, perdió la línea adecuada varias veces y todas las opciones a estar cerca del podio.
Doble medallista mundial, Vilarrubla al menos pudo acabar en puestos de diploma olímpico con ese octavo puesto, que supone una buena participación en estos Juegos de Tokio, en los que el equipo de eslalon se está comportando de nuevo como un valor seguro.
Maialen Chourraut, campeona olímpica en Río 2016 y bronce en Londres 2012, cerró el círculo con una plata en K1 femenino, y Ander Elosegi, en C1 masculino, sumó su cuarto diploma con una octava plaza.
Este viernes cerrará la participación del equipo de eslalon el segoviano David Llorente, subcampeón mundial, que disputará las semifinales de K1 masculino, a las que accedió con susto tras saltarse una puerta en la primera manga de las eliminatorias iniciales.
Jessica Fox, espoleada por el agridulce sabor del bronce en K1 cuando su pretensión era alcanzar un histórico doblete, fue la mejor en la semifinal con 110.59, y en la final, presionada por el magnífico crono que había hecho la británica Mallory Franklin, hizo una demostración de clase, habilidad, concentración y poderío para colgarse el oro con un descenso sin fallos y un crono de 105.04.
Franklin, que pasó de 'tapada' a la lucha por las medallas, acabó siendo plata a 3.64 de la palista 'aussie', nacida hace 27 años en Marsella (Francia), y el bronce fue para la alemana Andrea Herzog a 6.09.
La brasileña Ana Satila, que había sido tercera en la semifinal, no pudo encontrar el refrendo de una medalla olímpica en sus terceros Juegos y tras ir perdiendo tiempo no pasó la cabeza en la puerta 22, con lo que fue penalizada con 50 segundos y acabó décima y última con 164.71.