Hacer deporte reporta numerosos beneficios, tanto al cuerpo como a la mente. Pero también hay que tener cierta mesura al hacerlo. Si no entrenamos de la forma adecuada, puede derivar en molestas lesiones que nos impidan tener un día a día llevadero. En este aspecto, estirar antes de salir a correr es algo fundamental y que no todo el mundo realiza correctamente.
Realizar estiramientos trae consigo numerosos beneficios. Aunque pueda parecer una tarea mundana, es muy importante estirar, tanto antes, como después del ejercicio o a la hora de salir a correr. Especialmente en los momentos previos para preparar a los músculos ante la fatiga que se viene.
Entre los beneficios a la hora de realizar estiramientos, se encuentra el favorecer la recuperación de los músculos y la circulación de la sangre en nuestro cuerpo. Al final de una carrera, después de que nuestro corazón haya estado bombeando con más ritmo, el estiramiento ayuda a que el cuerpo se enfríe y que se regrese a la normalidad; además de la detención del ácido láctico liberado con el ejercicio.
También se previenen los dolores y calambres o agujetas. Es por eso que los estiramientos son principalmente importantes para principiantes en el mundo del running. Hay que tener en claro que calentar los músculos previene y minimiza estos problemas; no hace que desaparezcan. Además de ayudar a evitar lesiones, también se ayudará a mejorar nuestra flexibilidad, algo que se reflejará en todos los grupos musculares y que además ayudará a reducir la tensión muscular.
Tener una rutina de entrenamientos antes y después de correr, ayuda a una completa reparación de los músculos, la circulación de la sangre y minimiza las posibilidades de caer lesionados. Estos son algunos de los ejercicios que podemos hacer para poner a punto nuestro cuerpo antes de una carrera o entrenamiento.
Para estirar correctamente y que el músculo se relaje, debemos mantener las posturas unos 10 o 15 segundos. Es importante medir la intensidad de los estiramientos y no forzar para evitar caer en lesiones.
Estiramiento de gemelos
Para estirar los gemelos, podemos apoyarnos a una pared, como si fuéramos a empujarla. Con las piernas separadas y los pies apuntando al frente, debemos hacer fuerza con la pierna que quede estirada para notar que el gemelo aprieta
Estiramientos de cuádriceps
Uno de los estiramientos más sencillos. Simplemente tenemos que llevar los pies a la zona de los glúteos, flexionando hacia atrás. Sujetando el pie con la mano unos segundos, notaremos cómo la zona se relaja.
Hay varias formas para hacerlo. Desde tumbarnos en el suelo con las piernas semiflexionadas e intentar tocar la punta de los pies con las manos. O, de pie, cruzando las piernas, intentar llegar a tocar el suelo con las manos –y alternando el cruce de piernas-. O también, como en el ejemplo, aprovechando un soporte y apretar ligeramente hacia abajo.
Estiramiento de espalda
Los estiramientos de espalda son muy importantes antes de salir a correr ya que esta zona de nuestro cuerpo sufre con cada pisada. Para realizar el estiramiento, intenta agarrar un suporte que te impida agacharte y estira la espalda mientras haces fuerza al bajar.
Estiramiento de tobillos
Los tobillos es otra de las partes del cuerpo que más sufren al correr. Lo ideal es calentarlos, girando los pies, solo con los dedos apoyados en el suelo, en el sentido de las agujas del reloj y viceversa.
Estiramiento de tronco superior
Aunque corramos con las piernas, debe mantenerse el equilibrio con el tronco superior. Es importante calentar también los brazos o las cervicales a la hora de hacer running.