Si algunos se preguntan si el rugby y el fútbol americano son iguales, la respuesta es no. Tienen muchas similitudes, pero también muchas diferencias que comentaremos a continuación.
Hay una diferencia clara con respecto al número de participantes por equipo en cada disciplina. Mientras que en el rugby pueden ser 13 en la Liga o 15 si se trata de la Unión de rugby, en el fútbol americano son 11 jugadores.
Hasta algo tan básico como es el balón tiene ligeros cambios. La forma es bastante parecida su tamaño oscila entre los 30 centímetros de largo y entre 55-60 por la parte más ancha. En el fútbol americano su forma en los extremos es más acentuada mientras que el de rugby está más relleno por la parte del centro.
Tanto el planteamiento del juego como a la hora de hacer sustituciones son muy distintos. En el fútbol americano no hay límite de cambios, incluso se puede dar que tras una pérdida de posesión los 11 que están en el terreno de juego pueden ser sustituidos todos de golpe y entrar un equipo totalmente nuevo. Sin embargo, en el rugby no sucede esto, hay limitación y cada equipo puede realizar hasta un máximo de 8.
En los dos conservan la misma forma, pero no el tamaño. De largo el rugby presenta 100 metros por los 91,44 que tiene el fútbol americano. Los primeros también suelen ser algo más anchos.
En ambas disciplinas tiene forma de 'H', pero las medidas varían, aunque no mucho. En el rugby se sitúa el travesaño a 3 metros de altura con una separación de 5,6 m entre los dos palos y se coloca en la línea de gol o try. Mientra tanto, en el fútbol americano está a 3,05 metros, los postes separados por 5,64 o 7,11 metros y se posiciona en los extremos del campo, por detrás de la zona de anotación.
Aquí hay diferencias importantes. Un partido de fútbol americano se divide en cuatro cuartos de 15 por lo que el total del mismo sería de 60 minutos. También hay que señalar que en ocasiones específica como cuando un equipo anota un gol, el tiempo se para y se reanuda cuando lo hace el balón. En el rugby hay dos mitades de 40 minutos por lo que el encuentro en total dura 80. En este caso nunca se para el tiempo, da igual la situación en la que esté que el cronómetro sigue corriendo, aunque el árbitro si lo estima oportuno puede añadir tiempo.
En las dos categorías hay un tiempo extra en caso de haber empate.
A la hora de vestirse y salir al terreno de juego también hay claras desavenencias. En el fútbol americano los jugadores portan cascos para proteger la cabeza, hombreras, rodilleras, etc. Mientras que el rugby no se permite nada de esto, alguna protección, pero sin gran relleno. No está permitido portar elementos duros ni para protegerse a uno mismo.
Las jugadas que suman puntos son muy parecidas, pero hay pequeñas diferencias. En ambos las maneras más comunes de anotar son avanzar con el balón en las manos o patearlo para que sobrepase el travesaño, pero se otorgan diferentes puntos en uno y en otro. En la primera acción en el fútbol americano se consiguen 6 puntos y en el rugby por lo mismo 5.
Esta acción está permitida en ambos deportes, pero con matices. En el rugby solo se puede bloquear al jugador que lleva el balón, mientras que en el fútbol americano se permite hacerlo a cualquier integrante del equipo rival independientemente si lleva la pelota.
Este es otro de las diferencias con respecto al curso del juego. En el fútbol americano está permitido que el balón se desplace hacia delante en ciertas situaciones, sin embargo, en el rugby solo se puede pasar a los compañeros que están en los lados o detrás de ti.