En muchas ocasiones disponer de una buena salud deportiva depende de los estiramientos que realizamos antes y después de practicar deporte. Esto será muy importante de cara a las lesiones que podamos evitar. Debes saber que hay dos tipos distintos: estiramientos dinámicos y estiramientos estáticos y a continuación te contaremos en qué consiste cada uno de ellos y las diferencias que existen entre ambos.
- Aumenta la flexibilidad: si realizas estiramientos harás que se retrase en tu cuerpo la reducción de la movilidad. Además, si haces ejercicios para estirar independientemente de si haces deporte o no te puede ayudar a que tu flexibilidad mejore.
- Mejora el rango de movimiento: cuando haces con frecuencias estiramientos te permitirá aumentar el rango de movimiento de las articulaciones.
- Mejora el rendimiento en la actividad física: hay muchas personas que no prestan atención a este aspecto tan importante y se ha demostrado a través de numerosos estudios que también contribuye a mejorar el rendimiento deportivo.
- Aumenta el flujo sanguíneo a los músculos: te ayudará a que la sangre llegue mejor al músculo. El aumento del flujo hace que a la hora de recuperar los músculos tras una sesión de deporte sea mucho más rápida.
- Mejora la postura: a lo largo de nuestro día a día cogemos muchos malos vicios a la hora de andar o simplemente sentarnos. Esto hará que vayamos adoptando una mala postura. Para solucionar este aspecto, un buen método es hacer estiramientos de grupos musculares específicos para reducir el dolor musculoesquelético y mejorar la postura.
- Disminuye el estrés: la tensión que sufrimos recae en nuestros músculos haciendo que estos se pongan más rígidos. En las partes en la que más notamos estas contracciones son el en cuello, los hombros y la parte superior de la espalda. Hacer estiramientos puede que esta tensión o parte de ella la liberemos y sintamos alivio.
Cuando hablamos de estiramientos estáticos nos referimos a un tipo de ejercicio que se realiza sin movimiento para aislar a un grupo muscular a la vez. Deberás estar en esa misma posición durante un periodo determinado de tiempo.
Mientras que el estiramiento dinámico se ejecuta con movimiento. Son ejercicios que deben tener dinamismo, energía e incluso saltar o correr para hacer que se ponga a prueba el rango de movimiento y la flexibilidad.
Dentro del estiramiento estático encontraremos dos tipos distintos. Por un lado, activo, es decir, la persona hará el estiramiento del músculo antagonista sin utilizar ninguna asistencia externa. Por otro lado, pasivo en el que se utilizará un elemento externo para poder completar el ejercicio como puede ser una pared, una silla o incluso un compañero que te ayude.
Con el dinámico, como ya su nombre indica, estará presente el movimiento. Esto se hace para que los músculos y las articulaciones se habitúen a los movimientos que harás durante el ejercicio o deporte que hagas. Esto hará que indirectamente tu flexibilidad mejore y el riesgo de lesión disminuya.
Hay que destacar que hay estudios que apuntan que el estiramiento estático después de la práctica deportiva puede contribuir a que se mejore la recuperación tras esta, sin embargo, también apunta a que puede empeorar el rendimiento deportivo si se hace antes. En resumen, el estiramiento dinámico es mejor realizarlo antes ya que aumenta la fuerza, la potencia y el rango de movimiento de cara al deporte que vas a hacer y es mejor hacer un estiramiento estático una vez que has terminado de cara a que tus músculos se recuperen mejor de cara a la próxima sesión.