Novak Djokovic salió victorioso en Wimbledon tras una final histórica ante Roger Federer. Las estadísticas favorecieron a Federer, pero fue Djokovic quien levantó la copa del torneo británico. No cabe duda que fue una final épica con muchas emociones y, sobre todo, mucha calidad y talento.
El partido llegó hasta el tiebreak del último set, 12-12, la final más larga del tenis. Por fin, Federer falló un golpe, dándole la victoria al serbio. Federer era el claro favorito del público, pero fue Djokovic quien acabó celebrando de una forma curiosa. ‘Djoko’ se comió un pedacito del césped de Wimbledon, saboreando su victoria.