La eliminación de la selección española en los octavos de final del Mundial de Qatar. va a dejar muchas imágenes para la historia del fútbol español y los mundiales. La derrota de España ha caído como un jarro de agua fría en la afición española pero una de las imágenes que más daño podrán hacer es una que ha pasado desapercibida.

Achraf Hakimi, la gran estrella de la selección marroquí y nacido en Getafe, ha sido el encargado de anotar el último penalti de la tanda que provocaba la vuelta a casa del combinado de Luis Enrique. Tras una auténtica templanza marcado a Unai Simón con un disparo a lo panenka, el ex canterano del Real Madrid se ha acordado de su compañero en el París Saint-Germain y una de las grandes ausencias de la convocatoria de Luis Enrique: ha celebrado el pase a cuartos ante España con la celebración que realiza junto a Sergio Ramos.

Aunque en un primer momento podía ser solo un gesto de alegría de Achraf, poco ha tardado en aparecer la curiosa imagen de los dos defensas del PSG celebrando junto como si fueran pingüinos. Una imagen icónica para los aficionados del conjunto parisino y ahora también para los aficionados marroquíes y españoles.

Marruecos se convirtió en el primer país árabe en alcanzar los cuartos de final de un Mundial, en la primera edición de esta competición que se celebra en un país árabe. Los "águilas del Atlas" se convirtieron en la selección número 40 que estará entre los ocho mejores en un Mundial, tras haber superado como primeras la fase de grupos y haber derrotado en una tanda de penaltis a España en octavos de final.

Gracias a la gran actuación del portero Bono, Marruecos se convierte además en el primer país africano que gana una tanda de penaltis en un Mundial y el primero en alcanzar los cuartos de final desde que lo hizo Senegal en 2010.

El guardameta del Sevilla mantuvo su portería a cero durante el tiempo reglamentario, la prórroga e, incluso, la tanda de penaltis, en la que paró los de Busquets y Soler, mientras que el de Sarabia se estrelló en un palo. Marruecos es el cuarto país africano que se mete entre los ocho mejores de un Mundial, tras Senegal en 2010, Camerún en 1990 y Ghana en 2010.

En Catar, el primer país árabe en celebrar un Mundial, Marruecos es el único superviviente en los cuartos que no es europeo o sudamericano.