Su último gran contrato: Jorge Lorenzo (Mallorca, mayo del 87). Con 31 años y cinco títulos mundiales, el piloto balear sigue siendo una de las perlas del mercado pero también ve como la nueva hornada de pilotos vienen pisando fuerte. Y es que nombres como Joan Mir o Jack Miller han estado encima de la mesa como relevo de Pedrosa.
La sed de títulos del campeón: “Voy a correr dos años más en MotoGP con una moto muy competitiva. No soy un piloto, soy un campeón”. Son las rotundas palabras de Lorenzo hace apenas una semana cuando se planteaba su futuro. Con cinto títulos mundiales, Jorge quiere más y es conciente que en el Repsol Honda tendrá todas las armas para lograrlo.
No ser escudero de Rossi: Conocida la ruptura entre Ducati y Jorge Lorenzo se planteó que Yamaha optase por abrirle la puerta de regreso. Eso sí, con una moto satélite. Este hecho dejaría a Valentino Rossi y Maverick Viñales como pilotos oficiales siendo Lorenzo el piloto satélite. Conocida la ‘irregular’ relación entre el balear y el piloto italiano, poca gracia le haría a Lorenzo estar un escalón por debajo de Rossi.
Respeto a Márquez: Los tres títulos Mundiales de MotoGP de Lorenzo y los cuatro de Márquez en la máxima cilindrada. Entre ambos se han mostrado respeto dentro y fuera de la pista. Incluso se les vio unidos cuando llegaron las acusaciones de ‘biscotto’ de Rossi tras la patada de Márquez en Sepang.
Ser campeón con otra fábrica: Los tres títulos de Jorge Lorenzo en la máxima categoría llevan la firma de Yamaha. Aceptó la oferta de Ducati para intentar ganar con otra moto pero la aventura está saliendo mal. Ahora recibirá la RC213V para luchar por otro título alejado de Yamaha.
La autoridad de Puig: La llegada de Alberto Puig al Repsol Honda ha sido un golpe de efecto dentro del equipo. No le ha temblado la mano a la hora de tomar decisiones, como con la reciente salida de Dani Pedrosa. Ahora con la llegada de Lorenzo, el nuevo jefe tendrá otra prueba de equilibrio dentro del garaje.
Un contrato a su altura: Aún no son oficiales las cifras pero Jorge Lorenzo firmará con un contrato tipo de MotoGP: dos temporadas. La ficha del piloto español rondará los cuatro millones de euros por cada uno de los años.
Un equipo para la historia: Los números hablan por sí solos. El Repsol Honda tendrá en sus filas a los dos pilotos que se han repartido los títulos mundiales desde el año 2010 (tan solo Stoner consiguió llevarse la corona de 2011, también con Honda). La dupla española, con números del pasado Gran Premio en Italia, suman 83 victorias y 178 podios. Un equipo Jorge-Marc en 2019 que puede pasar a la historia del Mundial.
Ser referencia del mercado español: Allá donde va no hace falta preguntar a los aficionados quien es Jorge Lorenzo pero la llegada al Respol Honda le situará aún más en el primer escaparate del mercado español. Junto a Márquez será la imagen a nivel mundial de una fábrica japonesa pero con patrocinador nacional. Y no es cualquiera.
Su espíritu indomable del espartano: Ese espíritu espartano, esa lucha incansable del 99, ese alma de guerrero… que le acompaña desde la niñez. Jorge Lorenzo no se arruga ante nada y asume el reto de su vida. Llega en silencio pero, no lo dude, con un único objetivo: ser campeón del mundo.