Nani Roma nos cuenta cómo se vive en la burbuja del Dakar. El piloto está en Jeddah, Arabia Saudí, para poder salir y ya estar sobre el terreno. Roma lleva 48 horas aislado y explica en Deportes Cuatro cuáles son las medidas de seguridad que tienen los pilotos para poder participar en el Dakar.
Laia Sanz, que partió este domingo a Jeddah en uno de los vuelos chárter de la organización de la prueba, dio negativo en la primera de las dos PCR obligatorias para poder estar en el podio de salida. "Hemos tenido que hacer una prueba antes de viajar y, una vez ahí, tenemos que estar dos días encerrados en el hotel, donde nos harán otra PCR para incorporarnos a la burbuja del Dakar", explicó Laia.
"Después, creo que todo estará controlado y podremos estar un poco más tranquilos. ASO siempre hace un gran trabajo con la organización, así que estará todo muy bien. Hay que estarles agradecidos, ya que, dada la situación, que haya Dakar es una gran noticia", indicó la piloto de KH7.
La catalana admitió que -tras conocerse los primeros positivos que privarán a algunos participantes de viajar-, "da miedo esta situación, pero después de tantas cosas, al final también hay un poco de mala suerte". "Conozco algún positivo que tenía que estar en la carrera y que no sabe cómo se ha cogido el coronavirus. Es mejor no pensar mucho en ello. Ya he pasado suficiente este año como para obsesionarme con esto ahora", agregó.
Laia Sanz sabe que esta edición será la más complicada que haya tenido que afrontar nunca, debido a la enfermedad de Lyme, que la ha dejado convaleciente durante varios meses. Pese a ello, la 18 veces campeona del mundo se muestra con ganas de sentirse bien encima de su GasGas. "Estoy muy contenta de poder ir finalmente a Arabia Saudí. Han sido unos meses duros, con muchas incertidumbres", apuntó.
"Es un regalo estar aquí e intentaré disfrutar al máximo, dentro de lo que cabe. Llego menos preparada que nunca, pero cuando me ponga el casco, las ganas de dar gas estarán ahí. Veremos cómo responde el físico", concluyó.