El luchador Conor McGregor ha aceptado el reto de combatir contra el púgil irlandés Luke Keeler. Y lo ha hecho después de que Keeler publicara en sus redes sociales un mensaje dirigido a McGregor tras ver las polémicas imágenes de la leyenda de la UFC golpeando a un anciano en un pub.
“Es triste ver cómo Conor McGregor cae tan bajo. Estaría feliz de ponerle en su lugar si tuviera las pelotas de subirse a un ring”, publicó Keeler.
Según los medios ingleses, Keeler telefoneó a McGregor para llegar a un acuerdo y éste ha aceptado el combate. Por su parte, McGregor guarda todavía silencio sobre la agresión al anciano. Su intención era volver a competir en UFC y esta puede ser la ocasión que estaba esperando.
McGregor ha sido muy criticado después de que saliera a la luz un vídeo en el que propinaba un puñetazo en la cara a un hombre de 60 años después de que éste rechazara un trago de whisky que le ofreció el luchador.
Un testigo comentó el incidente: “Estaba tomando su cerveza cuando McGregor entró y les ofreció a todos un trago de su whisky. Algunos aceptaron pero este hombre no toma nunca. Sin embargo, Conor insistió en que lo tomara y cuando se negó por segunda vez, McGregor se enfadó".