Jorge Lorenzo ha anunciado su retirada. El próximo Gran Premio en Valencia sera la última vez que se suba a una moto de competición profesional. Pentacampeón del mundo, tres en la máxima categoría, el piloto de Palma de Mallorca ha dicho adiós junto con Carmelo Ezpeleta, CEO de Dorna y ha hablado de la falta de motivación que siente y de los mejores momentos de su carrera.
"Siempre he creído que hay cuatro días que son importantes para la vida de un piloto. Cuando debutas en el Mundial, cuando ganas tu primera carrera, cuando ganas tu primer Mundial, algo que no todos pueden conseguir y que yo y muchos hemos conseguido, y el cuarto es cuando anuncias tu retirada. Este día ha llegado para mí y estoy aquí para anunciar que este domingo será mi última carrera en MotoGP", señaló Lorenzo en una rueda de prensa extraordinaria y convocada este mismo jueves.
Un anuncio que llega tras darse cuenta de que ya no puede, a corto plazo, luchar por una victoria que le es totalmente necesaria por su "perfeccionismo". "Me encanta pilotar, la competición, este deporte, pero por encima de todo me encanta ganar y me di cuenta de que esto ya no era posible, por lo menos a corto plazo con Honda. Así que en esta fase de mi carrera era imposible mantener una motivación que ya no tengo", explicó.
El balear cree que esta "es la mejor decisión" tanto para él como para el Repsol Honda. "Porque Honda y Lorenzo no pueden luchar solo por entrar en los puntos, aunque podíamos acabar luchando por podios. Honda y yo somos ganadores y siempre necesitamos luchar para ganar", añadió en este sentido.
Lorenzo tomó la decisión de poner fin a su carrera después del último Gran Premio, en Malasia. No obstante, venía reflexionado sobre esta posibilidad desde su dura caída en el Gran Premio de los Países Bajos, cuando sufrió una lesión cervical durante los entrenamientos que le dejó fuera de cuatro carreras.