Joaquín ha vuelto a los entrenamientos del Betis hecho un chaval. Él mismo se encargaba de mostrarlo al entrar en las instalaciones del club para pasar el reconocimiento y hacerse el test.
“Ahí me tenéis hecho un ‘chiquillo’”. Así entraba, enseñando sus abdominales, orgulloso de sus resultados después de dos meses y medio. Aunque no llevaba los zapatos adecuados el jugador no se ha resistido a pisar el césped.
El andaluz ha tenido algún que otro problema para ponerse los guantes. Después de romper uno de ellos, el segundo par se ha vuelto a resistir y después de mucho faenar lo ha conseguido.
El bético venía dispuesto a todo y se ha sorprendido de que no tuviera que hacer ningún tipo de esfuerzo físico. “Si hay que correr se corre”, decía tras realizarse las pruebas médicas.