El coronavirus ha cambiado el mundo del fútbol por completo. No solo en la forma provisional de jugar sin público, sino también en todo lo relacionado a nivel económico. Varios clubes de la Liga han tenido que acogerse a ERTEs y, prácticamente la totalidad de equipos profesionales tienen que hacer números para cuadrar la próxima temporada tras este imprevisto.

Ante tal situación, lo normal será que los equipos bajen los salarios a sus futbolistas para poder mantener solvencia. Cada mes, los equipos deben presentar a LaLiga los presupuestos y la caja para que la patronal determine el dinero a invertir en las fichas de la plantilla.

Con todo lo que ha acontecido con el COVID-19, se estima que el 70% de la pérdida de ingresos, alrededor de 600 millones de euros, tenga que financiarse por la vía salarial; reduciendo los sueldos de los futbolistas. O fichando a jugadores más baratos. Son las soluciones aportadas por Javier Tebas, presidente de la Liga.

Los clubes deben fijarse al límite salarial que tengan establecido y el descuadre ante el menor número de ingresos que supondrá, por ejemplo, el hecho de disputar encuentros a puerta cerrada, será una tara para los equipos. Pero, para ello, deben acordar las rebajas salariales con sus profesionales.

Si los futbolistas se atañen al artículo 41.3 del Estatuto de Trabajador, se permite a las empresas la modificación sustancial de los contratos alegando causas económicas o productivas; pero también permite a los trabajadores marcharse de la empresa y además, recibir una indemnización de 20 días de salario por año de servicio. Una vía legal que puede beneficiar a los futbolistas; pero también rematar a los clubes que se hayan acogido al ERTE.

Los estamentos también pueden, llegado el caso, a modificar el convenio colectivo para reducir el salario mínimo de 165.000 euros en Primera; pero no parece que la AFE vaya a negociar en contra de sus propios trabajadores. Otra alternativa puede ser que el Gobierno lance una reforma laboral en la que se incluye la posibilidad de que los clubes bajen los salarios.

El fútbol ha cambiado con el coronavirus y es posible que en la próxima temporada se reformen las medidas pertinentes con los sueldos de los futbolistas. Actualmente, un jugador puede negarse a que le rebajen el sueldo, cobrando además una indemnización.