En cuanto llega el mercado de fichajes clubes y jugadores empiezan a escuchar ofertas y negociar para encontrar la mejor fórmula de traspaso. Los fichajes se han disparado y ya se alcanza con normalidad cifras desorbitadas como de 60 o 70 millones, pero se olvida o no se conoce bien que hay una serie de agentes libres que pueden llegar a los equipos a coste cero.
En el mundo del fútbol se entiende por agente libre aquel jugador que no está vinculado a ningún club o el contrato que tenía con una institución ha inspirado.
Esto se conoce como tener la “carta de libertad” ya que es el propio jugador junto a su representante el que negociará la vinculación con otro club en caso de que así lo desee y esto no supondrá ningún coste para el equipo.
Si el futbolista es liberado del club cuando el mercador está cerrado, como ha sido el caso de Jesé Rodríguez que se ha desvinculado del PSG, tendrá que esperar a la apertura del próximo para formar parte de un equipo.
Esto figura es relativamente reciente y tiene su origen a finales del siglo XX con el 'Caso Bosman'. El futbolista Jean-Marc Bosman asentó jurisprudencia en el derecho comunitario europeo.
El jugador que en el año 90 se encontraba jugando en el Lieja de la Primera División belga reclamó su libertad y la Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol tuvo que cambiar las normas.
El futbolista terminó en junio de ese año y le ofrecieron un año de contrato más que el rechazó por lo que le ponen a la venta con una cláusula de indemnización de 11.743.000 francos belgas a pesar de que el contrato se había terminado. El Lieja llega a un acuerdo de cesión con el US Dunkerque, pero este se negaba a pagar la cantidad por lo que las negociaciones se truncan, el jugador se queda y es apartado de la dinámica del grupo.
Por lo que Bosman decide presentar una demanda contra el club belga, la Federación Belga de Fútbol y la UEFA.
Tras el proceso contencioso el Tribunal de Justicia de la Unión Europea el 15 de diciembre de 1995 estableció eran ilegales las indemnizaciones por traspaso y los cupos de extranjeros cuando se aplicaran a ciudadanos de la Unión Europea.
Esto supuso que los jugadores directamente negociaran con los clubes los contratos y que los traspasos entre jóvenes talentos de otros países se hiciera más común. Esto indirectamente ha hecho que se formen y potencien muchas de las categorías inferiores de los grandes clubes europeos.
Estos son algunos de los futbolistas que se encuentran sin club