Los sicarios que querían matar a Kovacevic quemaron su coche tras el ataque. El exjugador de la Real Sociedad se encontraba cerca de su casa al sur de la capital griega cuando un hombre se bajó de su coche, le disparó y huyó.
La policía aún no ha encontrado el arma con el que se disparó pero sí el coche, completamente calcinado. Algunas versiones apuntan a un posible ajuste de cuentas por temas relacionados con el juego aunque según el propio exfutbolista no habría recibido amenaza alguna y desconoce el móvil del ataque.