Luis Enrique es el nuevo seleccionador de España. Vuelve tras verse obligado a dejar el equipo por la enfermedad y posterior fallecimiento de su hija Xana. Tras confirmarse su vuelta cinco meses después y el cese de Robert Moreno –su segundo en la primera etapa- queda patente que algo ha pasado entre los dos para que ponga como una única condición para volver: "Robert, fuera del organigrama de la Selección".
La relación entre Luis y Robert, que han compartido más de una década de trabajo conjunto, está totalmente rota y es inexistente. Ni siquiera Luis Rubiales, presidente de la Federación Española, era consciente de este debilitamiento personal entre ambos.
Según ha anunciado Manu Carreño, en ‘El Larguero’ de la Cadena SER, la última vez que Luis Enrique y Robert hablan es en el mes de agosto y por una llamada del entrenador asturiano. En ella le deja claro que “si vuelvo a la Selección tú no estarás conmigo”.
Luis Enrique considera que Robert le ha sido desleal en el momento más duro de su vida en decisiones deportivas y personales. Pero también con declaraciones públicas y con movimientos de ‘trepa’ dentro del organigrama de La Roja.
El entrenador asturiano es muy claro con Robert Moreno y le advierte que jamás volverán a entrenar juntos. Si Robert quiere seguir en los banquillos será por su lado pero ya nunca bajo la ayuda de Luis Enrique.
Hay un punto claro que Luis Enrique no le perdona y atiende al lado personal. El desde ayer nuevo seleccionador no entiende que Robert nunca le hiciese una llamada, o un mensaje, preguntando por su estado u ofreciendo ayuda tras el fallecimiento de Xana.
Luis Enrique ha recuperado su puesto y lo ha hecho con la única condición que le puso a Rubiales para aceptar la vuelta: Roberto Moreno, fuera del equipo. Ambos no han vuelto a hablar. La relación de diez años es inexistente.