Messi es libre para fichar por el equipo que quiera a partir del 1 de enero. El argentino termina contrato con el Barcelona y todos los aficionados culés esperan la decisión del argentino antes de que finalice la temporada. No se ha pronunciado y no lo hará hasta que termine este año con el Barcelona, lo que tiene claro Messi es que tomará la mejor decisión para el club y para él.
El argentino desveló en una entrevista a Jordi Évole en laSexta que lo pasó mal el pasado verano con su salida frustrada del Barça. "Pensé que había cumplido un ciclo, que necesitaba un cambio, mi cabeza necesitaba salir de todo esto, por los líos que había en el club, por lo que se venía, yo sabía que este año iba a ser un año de transición, de gente nueva, y yo como siempre le dije quería seguir luchando por conseguir más títulos y sentía que era el momento del cambio, quería irme y quería hacerlo bien", explicó.
El capitán azulgrana señaló de nuevo a Bartomeu como culpable de que su deseo no se cumpliera. "El presidente no quiso y empezó a filtrar cosas y hacerme el malo de la película, yo estoy tranquilo. No era fácil decidir que me iba del club de mi vida, de mi ciudad. No tenía que haber sido tan drástico", añadió.
"En muchas cosas (me engaña Bartomeu) y en varios años. No me gusta hablar de cosas privadas que pasaron. Es todo un camino, el último año fue duro, ya veníamos de dos años anteriores difíciles por cómo habíamos quedado eliminados de la Champions. Hay muchas circunstancias para tomar la decisión", insistió.
Para Messi, que explicó sabía que el juicio le sería favorable pero no quiso ese final, el traspaso de Luis Suárez al Atlético fue otra "locura" de la directiva. "Yo ya lo tenía decidido antes de eso, pero me pareció también una locura lo que hicieron con Luis, por cómo sucedió y cómo se fue. Se fue gratis y se fue a un equipo que iba a jugar por los mismos objetivos que nosotros", confesó sobre el traspaso de su amigo.
"No tengo nada claro hasta que termine el año. Me costó porque realmente no estaba en el lugar donde quería estar, me costó adaptarme también al vestuario. Hay mucha gente nueva, no había ninguno de los que me rodeaba antes, mucha gente de fuera. Hace más difícil unir al vestuario, pero lo vamos haciendo. No sé si me voy a ir o no, si me toca irme me gustaría irme de la mejor manera", dijo.
Por otro lado, Messi calificó de "gran acierto" la elección de Ronald Koeman para el banquillo. "El club está realmente mal, está muy mal, y va a ser difícil estar donde estábamos. Con Koeman se le dio una seriedad y una idea de lo que pretende, fue un gran acierto. Está haciendo las cosas muy bien. El equipo va a crecer", apuntó.
Además, sobre las elecciones a la presidencia del Barça, Messi prefirió no "posicionarse". "Que salga el mejor para el club, se va a encontrar una situación muy difícil, no va a ser fácil darle la vuelta a todo esto. Va a ser difícil traer jugadores, hace falta dinero y no hay dinero, hay que traer varios jugadores importantes para volver a pelear por todos. Me preguntas por Neymar y traer a Neymar debe ser carísimo", explicó.
El argentino mostró su deseo de jugar en Estados Unidos, reconoció el golpe de la muerte de Maradona y se quedó con Pep Guardiola y Luis Enrique como "los mejores". "Yo tuve la mala suerte entre comillas de que tuve mucho tiempo a Guardiola y Luis Enrique, los dos mejores. Tenerlos tan seguidos y tan rápido hizo que yo crezca mucho en lo futbolístico y en la sabiduría táctica que me enseñaron ellos", terminó.