Koeman tenía un gran reto por delante cuando llegó. Cambiar al equipo, no en cuanto a jugadores, que finalmente se ha visto como se han hecho pocos cambios, pero sí la actitud.

Atrás queda la imagen del 2-8 ante el Bayern donde un irreconocible Barça había sido arrollado. Hasta el momento, el efecto Koeman se está viendo en el campo. "Se juega como se entrena", así de fácil lo resumía el holandés. Sin apenas descanso y con entrenamientos intensos estamos volviendo a ver la mejor versión de un FC Barcelona que terminó muy tocado la temporada pasada.

En dos partidos han conseguido 7 goles a favor y 0 en contra. El equipo se ha mostrado muy sólido en defensa con las líneas muchos más juntas y con Messi liberado en la posición de falso nueve. El sistema también es nuevo, desde el principio dejó claro que habría un doble pivote en donde la veteranía de Busquets y la juventud de De Jong están encajando a la perfección.

Algo que también ha cambiado y mucho es la mentalidad y la actitud. Cuando finalizó La Liga en la pasada temporada las palabras de Messi dejaban a las claras que no confiaban mucho en lo que estaban haciendo y se acabó viendo en la fase final de la Champions.

Koeman decía en rueda de prensa que "de momento estamos bien, confiamos en nosotros mismos". Esta confianza le ha llevado hasta la fecha a conseguir las dos victorias en Liga y sobre todo ante el Celta en donde en la primera parte se quedaron con 10 y supieron aguantar durante todo el encuentro e incluso marcar más goles y ampliar el marcador.

Los dos grandes partidos que ha firmado el joven de la cantera dan la razón al entrenador de ponerle titular. Dembélé hasta el momento no ha gozado de muchas oportunidades. Mucho se ha hablado en los últimos días de su posible salida del Barça que entraría en ese plan de deshacerse de jugadores con grandes sueldos para poder fichar.

Koeman quiere un delantero y no podría llegar si alguien no se va. El técnico ha hablado sobre su posible marcha y de momento no la descarta, "ya veremos", decía. Al principio de este nuevo proyecto, cuerpo técnico y directiva contaban con él, es más, Koeman había diseñado un plan especial para recuperarlo y que no forzara para lesionarse.

Los cambios ante el Celta le terminaban de señalar y Pedri o Trincao estaban por delante de él. A esto hay que sumarle su falta de disciplina que no gusta nada al entrenador. Ha llegado varios días tardes y esto lo tiene muy en cuenta.