Los hechos que tuvieron lugar en el Carranza en la jornada en la que Cádiz y Valencia se enfrentaban en un partido de Liga va a traer cola y al ser un hecho que nunca se había producido servirá para que los organismos pertinentes tomen medidas y lleven acabo un protocolo de actuación a la altura de las circunstancias. Diakhaby y Cala tuvieron un enfrentamiento y según apunta el jugador valencianista recibió un insulto racista por parte del central gaditano. El caso se en encuentra en plena investigación y en caso de que se demostrara que esto ocurrió sería sancionado gravemente sin poder jugar de dos a cinco años.

“Negro de mierda”, este es el presunto descalificativo que salió de la boca de Cala, algo que él se ha encargado de negar. La ausencia de pruebas o de una toma de cámara donde se vea cómo se lo dice complica y mucho la resolución de este asunto. El árbitro no lo percibió, pero sí que recogió en el acta lo siguiente:

“El jugador Nº 12 del Valencia C.F. Mouctar Diakhaby, una vez amonestado por discutir con un contrario, me dice textualmente: ‘Me ha llamado negro de mierda’ en referencia al jugador Nº 16 del Cádiz C.F. Juan Torres Ruiz”.

Las versiones son completamente distintas. Diakhaby sigue manteniendo su versión desde el primer momento y se ha pronunciado asegurando que se dirigió a él con ese insulto. Mientras que Cala asegura que no dijo eso ningún momento.

Esto no es un asunto menor. Todos los esfuerzos se están poniendo para saber qué sucedió en ese desencuentro. El presidente de La Liga ya lo ha anunciado. “Nosotros hemos hecho un procedimiento interno de investigación y lo que tenemos que hacer con los vídeos e imágenes del partido ver y aclarar lo que pasó en ese instante".

"La reacción del jugador del Valencia... algo pasó y desde luego vamos a intentar aclararlo porque en LaLiga no permitimos y no queremos que haya nada de racismo en nuestro fútbol. Creo que con el público lo hemos parado bastante, pero desde luego que no haya insultos entre los jugadores. Las versiones que hay son algo contradictorias pero la conducta del jugador del Valencia... algo pasó".

Con el reglamento en la mano y atendiendo al código disciplinario de la Federación Española, en el artículo 72 se recoge que “los insultos que impliquen una vejación a una persona por razón de su origen racial o étnico” están sujeto a una sanción que implica la retirada de su licencia como futbolista profesional durante un periodo de entre dos y cinco años. A esto habría que añadirle que se podría enfrentar a una multa de 18.000 a 90.000 euros.