Victoria por la mínima del FC Barcelona ante el Levante. La falta de intensidad se hacía de nuevo patenten en la primera mitad, mucha posesión y pocas ocasiones de peligro real que pusieran contra las cuerdas a los levantinistas. Ya en el segundo tiempo los locales le meterían una marcha más y no sería hasta en el 75 cuando Messi dio el gol del encuentro.

Los de Koeman comenzaban como en la mayoría de los últimos encuentros, dominio sí, pero sin contar con ocasiones claras. El primer portero que se tendría que emplear a fondo sería Ter Stegen. Le filtraban un balón a De Frutos que este en el balcón del área se plantaba ante el alemán y sacaba el esférico con la rodilla.

A ese ataque respondían los azulgranas. El guardameta del Levanta sacaba a mano cambiada un disparo de Braithwaite. Griezmann poco más tarde tendría la suya de cabeza a centro de Messi, pero Aitor lo evitaba. Poco a poco el Barça se iba asomando más a las inmediaciones del área.

A pesar de estos avisos, no había un dominador claro del encuentro y los culés no daban la sensación de dominio absoluto. El Levante cuando empezaba a triangular llegaba con bastante facilidad al área rival. De nuevo el fantasma de los últimos encuentros volvía y la desidia se adueñada de los jugadores del FC Barcelona, sin presión y sin intensidad.

Los blaugranas cada vez tenían más posesión y el Levante se arrinconaba en su área y Aitor iba cogiendo protagonismo, los de Koeman llegaban, pero había una sensación de desgana que hacía que no fueran dominando al rival y con esta tónica y el 0-0 se llegó al descanso. Los dos generaron ocasiones en diferentes tramos de la primera mitad haciendo que los dos porteros fueran lo más reseñable sobre el césped.

En el comienzo del segundo tiempo comenzaban los culés con un punto más de intensidad y el Levante cada vez se encasillaba más. Estos lo intentaban con alguna contra, pero ya no llegaban con tantos efectivos ante Ter Stegen como en la primera mitad.

Leo Messi lo intentaban de todas las formas posibles desde falta, pero sin suerte. El equipo granota es una de sus víctimas favoritas, pero no encontraba la forma de batir a su portero. Hasta que en el minuto 75 lo consiguió con disparo cruzado imposible para el guardameta.

El Levanto hice cambios e intentó estirarse sobre el terreno de juego mientras que el Barça movía el balón para que pasaran los minutos. Los visitantes en el tiempo de descuento tuvieron su oportunidad para empatar. Morales remataba, Umtiti despejó y el VAR revisó porque había dudas sobre si el despeje del defensa había sido con la mano.