El Atlético de Madrid ya está trabajando para revertir la situación en la que se encuentran. El primer paso fueron las marchas de Cunha y Joao Félix, cedido al Chelsea. Tras él, seguirán Carrasco, quién tiene pie y medio en Barcelona, y Felipe, que deberá aceptar alguna de las ofertas que tiene encima de la mesa.
En el tema de las incorporaciones hay dos nombres que suenan con mayor fuerza. El primero es el holandés Memphis Depay, que ya se entrena con el resto de sus compañeros a falta de hacer oficial su incorporación. El segundo es Soyuncu, al que solo le falta la venta de Felipe para llegar a la capital.
Pero ahora el Atleti ha mirado un poco más allá y trabaja en la vuelta de dos nombres: Samuel Lino y Riquelme. La dirección deportiva del club ya se ha puesto en contacto con ambos y les ha trasladado su máxima confianza para el curso que viene. El club entiende que son dos jugadores con un gran desequilibrio y Simeone ya ha dicho que cuenta con ellos para ser importantes.
Lino llegó este verano al Atleti a cambio de 7 millones desde Gil Vicente. El club tenía buenos informes sobre el brasileño pero decidió que lo mejor para él era que siguiera creciendo en un club como el Valencia. Y vamos que si lo está haciendo. El extremo lleva cuatro goles y dos asistencias y es uno de los intocables para Gattuso.
Por su parte, Riquelme no deja de crecer a pasos agigantados. El joven español ya ha probado suerte en Bournemouth o Mirandés, pero este año es su primera temporada en primera con el Girona. Y se le está quedando pequeño. El futbolista es una de las revelaciones de LaLiga y ya suma cuatro goles con el equipo catalán.
Hay otros nombres encima de la mesa que también gustan a la dirección deportiva. Sergio Camello, que está siendo titular en el Rayo Vallecano; Manu Sánchez y su velocidad en el lateral izquierdo o Giuliano Simeone y Mollejo, que están dejando muy buenas sensaciones en Zaragoza, son algunos de los jugadores que también podrían ser importantes la temporada que viene.
Otros nombres como Cunha, con el que han sacado 50 millones después de que el Wolves activara la opción de compra, Lodi o Vitolo, no cuentan para el club. Por otro lado, el caso Joao es una excepción y se estudiará por si es mejor una venta o quedarse con el menino.