El entrenador de Noruega avisó en la previa y aseguró que para su equipo no sería un partido amistoso y de mero trámite y tras el pitido inicial lo demostraron. Los noruegos salieron a morder y en los primeros instantes ya se encontraron con las primeras ocasiones.
La más clara en los primeros 45 minutos fue una que Elyounoussi estrelló contra el palo. Berge filtró un pase desde la banda derecha que llegó a Haaland. El delantero entre los dos centrales supo hacerse un hueco para dar el pase de espaldas al jugador del Southampton. Este desde la frontal del área no se lo pensó y se sacó un zapatazo que no entró por centímetros.