La tuvo de todos los colores Suecia, pero el primero que consiguió percutir la portería rival fue Georgia. Se adelantó en el marcador sobre el minuto 60 tras una jugada de estrategia. El balón se puso en juego y tras quedarse embarullado en el área Kvaratskhelia lo rescató para mandarlo al fondo de la red.
El remate salió muy cerca de la portería sueca desde le centro y ni el portero ni los defensores pudieron sacarlo. La selección de Suecia se quedó un poco paralizada ya que hasta ese momento había dominado las ocasiones.