El Atlético de Madrid se ha quedado fuera de la Champions después de empatar este miércoles frente al Bayer Leverkusen de Xabi Alonso. Este empate le ha dado la clasificación a octavos de final al Oporto.

Antes de que se jugase el encuentro en el Cívitas Metropolitano, el equipo portugués hizo lo propio frente al Brujas con una goleada de 4-0 a domicilio. Esa victoria les dejaba con un pie y medio en octavos de final, pero dependían de lo que hiciera el club rojiblanco. 

El partido terminó 2-2 y ese empate daba el paso a octavos al Oporto y dejaba al Atlético de Madrid fuera de la Champions. Sin embargo, después del pitido final el árbitro revisó una jugada, por la que pitó penalti a favor de los de Diego Pablo Simeone. Una situación que los jugadores del club portugués vieron desde el avión, en el que celebraron el desenlace de la jugada. 

No hubo la épica de otras veces, fue algo más allá. La fe rojiblanca resucitó incluso con el pitido final, ya que en la última jugada, el árbitro pidió a los jugadores que no se retiraran por un posible penalti. Clément Turpin señaló la infracción de Hincapié y Carrasco se pidió el lanzamiento que detuvo el meta rival, después Saúl mandó el rechace al larguero y Reinildo también falló.

Un disgusto de 'Champions', tan cerca, pero tan lejos. El Metropolitano había recibido a los suyos con ambiente de noche grande y los jugadores apretaron. Sin embargo, el ganar o ganar subió las pulsaciones rojiblancas y precipitó el juego local, además de provocar un par de errores que castigó el Bayer con dos goles.