El Real Madrid puso punto y final a su mala racha como local tras derrotar al Kirolbet Baskonia (70-69) en un partido muy igualado que se decidió en los últimos segundos gracias a la aportación de Facundo Campazzo y Trey Thompkins, quienes lideraron la exigente victoria en la jornada 23 de la Euroliga.
El equipo de Pablo Laso no quiso más concesiones ante su público después de las 31 victorias consecutivas hasta su primer traspié hace un par de semanas y se puso el mono de trabajo para acabar con un Baskonia que vendió muy cara la derrota. Los vitorianos mandaron en muchas fases del encuentro y sólo una acción incomprensible de Stauskas permitió romper el equilibrio en el electrónico a dos segundos del final.
Campazzo anotó el primer tiro libre y erró el segundo para que Baskonia no tuviese tiempo de armar una jugada. El Real Madrid se llevó una trabajadísima victoria y recobra la buena senda en un partido que le permite mantener la segunda plaza en la liga regular de la Euroliga y que complica la existencia del conjunto vasco.