Delonte West ha pasado en unos pocos años de tenerlo todo, a no tener nada. Una caída a los infiernos que ha alcanzado su punto más lamentable tras la publicación en vídeo en redes sociales donde aparece apaleado en una carretera y posteriormente esposado en una acera.
West no sólo fue compañero de Lebrom James en Cavaliers, sino que también fue elegido en el draft de 2014 y jugó en grandes franquicias como Boston Celtics, Dallas Mavericks o Seattle Supersonics. Ahora, con 36 años, West malvive en la calle debido a problemas mentales y las adicciones al alcohol y las drogas.
Numerosas estrellas de la NBA, compañeros y rivales en su época dorada en el baloncesto, han pedido a la competición norteamericana que le eche una mano para poder revertir esta situación tan extrema.