El Consejo Superior de Deportes, la Liga y la Federación han hecho público el acuerdo en el que han pactado el regreso del fútbol. Luis Rubiales, Irene Lozano y Javier Tebas mantuvieron una reunión de más de de horas en las que quedaron resueltos los puntos básicos del acuerdo, que siempre estarán supeditados a las decisiones del Ministerio de Sanidad.
El Consejo Superior de Deportes (CSD), LaLiga y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) han pactado el retorno a los entrenamientos del fútbol profesional, supeditado a la evolución de la pandemia de la COVID-19 y a las decisiones que adopte el Ministerio de Sanidad.
Esta vuelta a los entrenamientos se producirá "siempre y cuando las circunstancias sanitarias lo permitan" y siguiendo "estrictos protocolos de salud" para proteger a los jugadores de un posible contagio por el coronavirus.
Después del encuentro de más de ocho horas que tuvo lugar el pasado sábado en el Palacio de Viana, sede del ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, la presidenta del CSD, Irene Lozano; el presidente de LaLiga, Javier Tebas; y el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, se comprometieron a dedicar parte de los recursos que generen los derechos audiovisuales del fútbol a un rescate al resto de deportes federados, olímpicos y paralímpicos.
Además, los presidentes de LaLiga y la Federación suscribieron un compromiso para crear un fondo de contingencia de 10 millones de euros, al que invitarán a participar a otras entidades como la Asociación de Futbolistas (AFE), para ayudar a los deportistas más vulnerables.
Tras las conversaciones del Palacio de Viana se acordó redactar un código de conducta del fútbol, aplicable a todos sus directivos, gestores y agentes, que pueda servir como referencia para otros deportes profesionales, y que permita "fortalecer un diálogo honesto y sincero y facilite las buenas relaciones entre las distintas instituciones del fútbol".
Las partes se comprometen a trabajar conjuntamente y de forma coordinada en el exterior para contribuir a la reputación de España y al fortalecimiento de la imagen como país de deporte seguro.
En este contexto, cobra especial importancia la candidatura ibérica al Mundial de fútbol de 2030, evento al que el Gobierno "prestará todo su apoyo, entendiendo que el entendimiento en el fútbol resulta imprescindible para las posibilidades" del país.