El Real Madrid aprobó con matrícula de honor su examen de regreso a la Champions tras el adiós de Cristiano Ronaldo. Los blancos buscan su cuarta Champions consecutiva y no pudieron empezar de mejor manera. Ante la ausencia del delantero portugués, Lopetegui ha hecho piña y el equipo juega más armado y con más pegada colectiva.
Así lo dejan claro las estadísticas del duelo ante la Roma. El Real Madrid ha intentado treinta remates ante los italianos, récord de un equipo en un partido en esta primera jornada de la Champions.
Pero este dato va más allá. La treinta de remates blancos a la portería romana están repartidos entre todos los jugadores titulares. Del once inicial de Lopetegui tan solo Varane y el portero Keylor Navas se quedaron sin la ocasión de ver gol.
La pegada del Real Madrid tiene un nombre propio en Europa: Gareth Bale. El delantero galés ha marcado gol en sus tres últimos remates en la Champions (dos goles en la final ante el Liverpool y un tanto ayer).
Isco Alarcón es otro de los nombres propios del estreno blanco. En su primer lanzamiento de falta directa ha conseguido ver puerta. Un cien por cien de efectividad que le convierten en el único jugador del Real Madrid que ha logrado marcar der falta directa en 2018 en todas las competiciones.
Y si de gol hablamos hay que destacar el trabajo de Mariano Díaz. El canterano ha marcado seis goles con el Real Madrid con solo nueve remates a portería. Ante la Roma el primer balón que tocó terminó en el tercer y último gol blanco.