Los vendajes deportivos servirán tanto para prevenir como para curar
Los dos motivos por lo que te puedes aplicar un vendaje deportivo
Los beneficios que aporta con respecto a otro tipo vendajes
El paso a paso para saber cómo vendarse correctamente
Cuando te lesionas, dependiendo de dónde y la gravedad recibirás un tratamiento u otro. Para algunos de los casos con un vendaje funcional es suficiente.
Este tipo de vendaje es para aplicar una inmovilidad parcial, es decir, que limita la movilidad en el sentido del movimiento en que aparece dolor o hacia donde pudiera empeorar, pero permitiendo el resto de movimientos de la articulación.
Este vendaje deportivo hace que no pierdas tanta masa muscular como cuando estás sometido a una inmovilidad completa, disminuye el riesgo de perder densidad ósea, rigidez articular, problemas circulatorios, etc.
Los tipos de vendajes deportivos
En el deporte tan importante es tratarse bien cuando sufres alguna lesión como intentar prevenirlas por todos los medios posibles, de ahí a que existan dos maneras distintas de aplicarse un vendaje funcional.
Prevención: como se venía diciendo, los deportistas utilizan este método para intentar minimizar los riesgos de sufrir una lesión. Los que más se utilizan son el los tobillos para evitar esguinces o en los tendones rotulianos para descargar el esfuerzo o para reforzar la zona de cara a las carreras o saltos.
Es habitual que los futbolistas entren y jueguen con vendajes en los tobilloscuatro.com
Vendaje terapéutico: en este caso es cuando ya tienes la lesión y sirva para mitigar el dolor y minimizar el riesgo de que empeore. No siguen las mismas instrucciones un deportista amateur, el cual tendrá que estar evitando hacer ejercicio en un periodo hasta que se cure, mientras que los profesionales agilizan el proceso, por ejemplo, es muy habitual ver a los futbolistas entrenar con un vendaje funcional al poco tiempo de hacer sufrido el esguince. Tendrá que tener cuidado con ciertos movimientos, pero podrá entrenar.
¿Cuándo se aplica un vendaje deportivo?
Estos son algunos de los casos en los que se utiliza este vendaje.
Para el control y reeducación de edemas.
Prevención de lesiones que se repiten.
Pequeñas roturas de fibras.
Distensiones ligamentosas de primer grado y en algunas ocasiones de segundo.
Fisuras de costillas, esguinces intercostales o neuralgias de este tipo.
Pequeñas fisuras en huesos largos del cuerpo.
Distensiones y elongaciones musculares y de los tendones.
Lesiones cápsulo-ligamentosas.
Descarga de tendinitis, tendinosis y fascitis plantar.
El codo de tenista es una de las tendinitis que más se dan en el teniscuatro.com
Los beneficios de aplicar un vendaje deportivo
Permite tener una mejor fijación de cara a una óptima recuperación terapéutica.
En caso de que hubiera herida, la presión ejercida sirve para contener las hemorragias.
Disminuir el dolor y los edemas en caso de tenerlos.
Facilita la regeneración de los tejidos al no estar incapacitado para hacer movimientos.
Previene las lesiones o recaídas derivadas de la lesión.
Te facilita el movimiento.
Cómo vendarse correctamente ante una lesión
Lo primero que debes tener en cuenta es el diagnóstico de un médico y que él te dé las indicaciones. A la hora de empezar a poner el vendaje la zona deberá estar limpia. La articulación implicada en posición funcional y los tendones y músculos, relajados.
Se suele utilizar un vendaje adhesivo inelástico y se pondrá de forma circular y sin presión para facilitar que la circulación fluya. Esta será la base para posteriormente poner las tiras activas.
De estas últimas van a ver dos tipos, elásticas o rígidas, dependerá de lo que se necesite. Los deportistas suelen utilizar un método mixto.
Después de esto se procederá a aplicar las tiras de fijación que harán que las activas se fijen al anclaje o a la piel del paciente. Con estas evitarás que el vendaje se arrugue.
Por último, las tiras de cierre serán la que envuelva todas las capas. Es esencial que una vez que te hayas hecho este tipo de vendaje deportivo le vigiles por si hubieras realizado mal la técnica y dificulte más de la cuenta la movilidad o el tránsito de sangre. Los deportistas deberán retirárselo una vez que hayan finalizado el ejercicio físico.