España cayó eliminada de los Juegos Olímpicos este miércoles tras caer ante Francia. Las chicas de Mondelo fueron a remolque durante todo el encuentro y al final acabaron perdiendo de tres. Pequeños fallos en los últimos minutos decantaron el encuentro de cara de las francesas. Algunas jugadoras recibieron feroces críticas y Laura Gil ha querido responder en una carta desgarradora en redes sociales.
"Quería empezar reconociendo mis errores. Ayer no estuve acertada, fallé tiros a a ojos de cualquiera eran tiros fáciles. Os puedo asegurar que ahora mismo estoy muy dolida. No voy a excusarme, pero no todos los días se está bien, ni al 100% en todas las facetas del juego. Intente ayudar en otros aspectos del juego, pero no fue suficiente", comentaba Laura Gil a modo de perdón.
Fueron los últimos párrafos de su carta los dedicados a aquellos que la han criticado, ferozmente, en las últimas horas por sus fallos: "Todo el mundo tiene derecho a opinar, pero no todas las opiniones son respetables".
El baloncesto español se marchará de vacío de los Juegos Olímpicos de Tokio tras la eliminación este miércoles del equipo femenino ante Francia (64-67), otra dura derrota que se une a la decepción en el reciente Eurobasket de Valencia y que confirma el verano 'horribilis' del equipo entrenado por Lucas Mondelo.
Después de siete veranos seguidos sin bajar del podio en todas las grandes competiciones internacionales, la racha de España se quebró contra Serbia en el Eurobasket. Seis semanas después, los cuartos de final vuelven a ser el muro en los Juegos de un equipo acostumbrado a triunfar. Se confirma así una travesía del desierto de al menos dos años, ya que España no estará en el Mundial 2022.
Contra Francia, un rival que encadenaba pesadillas contra España, el equipo entrenado por Lucas Mondelo iba un punto arriba a falta de 1:35 (62-61), cuando Laura Gil falló completamente sola debajo del aro la canasta que podría haber sentenciado la semifinal. Fue el inicio de un desgraciado final que siguió con la quinta falta de Alba Torrens, una canasta de Marina Johannes sobre la bocina a falta de 23 segundos y dos fatídicas posesiones finales que terminaron de liquidar a la todavía vigente subcampeona olímpica.