Gareth Bale se entrenó con normalidad con el grupo, pero llamó la atención por lucir un aparatoso vendaje. El galés sufrió un nuevo percance en el partido del Real Madrid en El Sadar.
El delantero del Real Madrid tiene un esguince en el dedo meñique de la mano derecha, pero no le impide ejercitarse con normalidad y podría entrar en la convocatoria de Zidane si el técnico francés lo considera oportuno para el próximo encuentro de Liga ante el Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu.
Llama la atención que Benzemá también luce un vendaje en su mano desde hace más de un año. El delantero francés se fracturó el dedo meñique de la mano derecha en el partido ante el Betis en el Benito Villamarín.