Jesé Rodríguez vive uno de sus peores momentos, tanto en lo deportivo, como en lo personal. El exjugador del Real Madrid se encuentra confinado por el coronavirus, y ha sido precisamente en su casa donde se ha enterado del duro varapalo en lo deportivo: el Sporting de Lisboa ha decidido cortar su cesión y devolverle al PSG, donde no saben qué hacer con él.
Al mal momento en lo deportivo, hay que sumarle el acoso que el futbolista sufre en redes cada vez que sube un post a su instagram o escribe un tuit en su cuenta de Twitter. El ex del Real Betis recibe críticas, insultos y menosprecios por cualquier cosa que hace.
A todo esto hay que añadirle los ataques que las dos madres de sus hijos han vertido contra él en esta semana. La primera en hacerlo fue Aurah Ruiz, que acusó el futbolista de haberse despreocupado de sus labores como padre durante el último año con el pequeño Nyan.
Este pasado jueves, Melody Santana, la madre de los dos primeros hijos del jugador, cargaba también duramente con él, asegurando que se había acabado "eso de ser comprensiva", ironizando con su papel de "super padre". Jesé, lejos de entrar en la polémica, prefirió regalarle un ramo de flores a su actual pareja, Janira Barm, por el día de Sant Jordi.